viernes, 24 de abril de 2009

Declaraciones de Neil Gaiman, que FSM le bendiga.

Leyendo el journal de Neil Gaiman me he encontrado con esto. Consecuencias: carcajadas internas y temblor de hombros incontrolable.


"Over the years I've got very used to being asked in interviews about Why Sandman Wasn't Political. Normally journalists would point out hoy very filled with politics all the other British writers of the school of eighty-something were, and that Sandman wasn't. And why is that? And I would hesitantly suggest that I thought that Sandman might have been a bit more political that they thought, and they would say no, it definitely wasn't; where was Margaret Thatcher, after all, and why hadn't I shown her eating babies with her vampire teeth?"



Martes, 21 de abril de 2009


Traducción para quien no pille inglés y si pille a Neil Gaiman:


"A lo largo de los años me he acostumbrado a que me pregunten sobre Por Qué Sandman No Trata la Política. Normalmente los periodistas señalan lo llenos que están de contenido político todos los demás escritores británicos de la escuela de los ochenta y tantos, al contrario que Sandman. ¿Por qué es así? Y yo suelo sugerir a regañadientes que pienso que Sandman quizá sea más político de lo que ellos piensan. Y ellos dicen, no, definitivamente no lo es. Después de todo, ¿dónde está Margaret Thatcher, y por qué no la he mostrado comiendo bebés con sus dientes de vampiro?"
Menos mal que, después de tener mis dudas, he confirmado que está divorciado.

jueves, 23 de abril de 2009

Chequeo médico

Hello, preas.
Como ya es definitivo que me dan la Erasmus a Londres (Queen Mary and Westfield College, allá voy!), he decidido hacerme unos cuantos chequeos médicos, para que no se diga que soy una sucia española llena de gérmenes. Sí, sí, reíd, pero por lo que me han contado de los ingleses, me extrañaría que no me mirasen la cabeza en busca de piojos y me grapasen después un cartón que dijera "Smithson".
En fin, ayer pedí hora para hoy a las 17:25. Como es normal, me han atendido tres cuartos de hora después. Mientras esperaba y sudaba (30º de calefacción dentro, insufrible), he mirado a ver cómo estaba el patio.
Lo que odio de venir a este ambulatorio nuevo es que me encuentro siempre a toda la gente que iba a mi mierdabar, y generalmente es gentuza a la que no tocaría ni con un palo de tres metros y diecisiete centímetros. Esta vez he esquivado las miradas de Manolín, el camello del barrio. Mandanga de la buena, o eso dicen. Tiene una cara de zarpero que no puede con ella, y creo que padece de guacheras también. Mala gente.
Además del Manolín de los cojones, había una niña sin correa que no paraba de dar pisotones en el suelo y contar hasta cinco a gritos. Estaría ensayando la lección, porque parecía muy concentrada en dar por culo con los numeritos. La madre no le decía nada, y cuando ya todos estábamos a punto de encender antorchas y agarrar horcas, le ha dicho "no te estás portando civilizadamente, Anaisë (seguro que lo escribía así, tenía una cara de madre-new age-consumidora a tiempo parcial de culebrones que no podía con ella), ¡estás castigada!". La niña se ha encarado con ella y le ha gritado "NOOOOO!!!". Después se ha derrumbado en una silla. No sé si ha sido por el impacto psicológico, la vergüenza de ser castigada por tu madre en público, o si ha sido alguno de los pacientes con una oportuna cerbatana.
Además de cotillear, también me he quedado unos quince minutos en stand by, pensando en cómo sería el médico esta vez. Lo digo porque cada vez que voy hay alguien distinto. En mi mente he empezado a imaginarme a un médico guaperas, medio moderniqui y simpático. Lo que ha salido por la puerta ha acertado una de tres. No está mal, no todo va a ser guapura y estilo.
Pues eso, le he pedido cita para el ginecólogo/a, análisis de sangre (me ha dado el vaso para que me haga el de orina, de propina y porque rima, ¡que divina!) y una alergología. De lo del neurólogo no ha querido oír ni hablar. Dice que mis migrañas no son ná, que si las tuviera dos veces a mes sí que me daba hora, pero que tal y como estoy, con una aspirina voy que chuto.
Luego he tenido que bajar a que me dijeran día y hora (porque el médico te saca unos papeles, pero luego hay que hacer trueque con los de Información). Me ha atendido un caballero que tenía un serio problema de Ceja Solitaria.
El diálogo ha sido así:
"-La alergología la tienes en Junio, ¿te parece bien?"
"-Me parece"
"-La citología el 11 de mayo, ¿te viene bien?"
"-Sí, me va bien -silencio incómodo mientras teclea, mi verborrea actúa - Además ese día empiezan mis vacaciones en el curro, así que mira, para celebrarlo, ajajá."
(nota: pretendía ser sarcástica/graciosa-que-te-cagas)
"-Pues nada..."-ha dicho él. Prácticamente he podido leer en su frente (encima de su ceja) "pues si para tí una citología es una celebración, llévate un gorrito gracioso y confetti para cuando tengas una colonoscopia".
Yo, como siempre, de éxito en éxito.